La leche es un alimento de una gran versatilidad que puede ser consumido por el ser humano de muchas formas. Desde forma líquida, tanto fría como batido o caliente para combatir la ola de frío polar que nos acecha, pasando por su transformación a productos lácteos clásicos como quesos, mantequillas o yogures, o los nuevos postres lácteos en los que casi todo está permitido. Pero la versatilidad de la leche no se queda ahí. Es una faceta mucho más desconocida,…