El turismo es una de las principales fuentes de riqueza de la provincia de Huesca. El territorio de esta provincia y su singularidad, que se deja ver en paisajes, arquitectura, tradiciones o gastronomía, entre otras muchas cosas, hace que sea única. Desde hace más de 15 años, la Diputación trabaja con la marca turística ‘Huesca La Magia’, con el fin de promocionar esta provincia. La marca, cofinanciada entre la Diputación y la Unión Europea, se centra en cuidar el patrimonio material e inmaterial del Alto Aragón, lograr un mayor número de visitas y trabajar en estrategias turísticas con las entidades locales para ofrecer una oferta común.
La carne de vaca es muy popular en esta provincia, como no podía ser de otra manera en esta provincia aragonesa. Se prepara de diversas formas: estofado de ternera aromatizado con tomillo, la lengua de ternera a la oscense… Una de las razas más habituales es la Parda de Montaña.
Uno de sus grandes encantos es el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, que está ubicado en el Pirineo oscense, íntegramente en la comarca del Sobrarbe. Se reparte entre los términos municipales de Bielsa, Fanlo, Puértolas, Tella-Sin, Torla-Ordesa y Broto. Recibe una media de más de 600.000 visitantes al año.
Su superficie ocupa 15.608 hectáreas y la zona de protección periférica cuenta con 19.679 hectáreas.
Es el segundo parque nacional más antiguo de España y el que más de Aragón, tras ser declarado el 16 de agosto de 1918, por lo que próximamente se va a cumplir un siglo. El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido es el séptimo parque nacional de España en número de visitantes.
(Fuente de las fotos: Wikipedia)